M. GONZÁLEZ / VILAGARCÍA La tragedia de la muerte de un trabajador de 41 años de edad no fue la única vivida por la plantilla de Autos Buenos Aires, en Rubiáns, en la jornada del miércoles. Unas cuatro horas después del accidente laboral mortal se producía el fallecimiento de la madre de otro trabajador, que no pudo reponerse del susto tras conocer la noticia del siniestro. La mujer, Teresa Paulos Iglesias, de 45 años de edad, era trabajadora de la empresa Larsa.

A pesar de que rápidamente se puso en contacto con su hijo, Gonzalo, por teléfono móvil, y comprobó que él estaba bien, Teresa Paulos, que tenía problemas de salud, comenzó a sentirse mal y se marchó a casa sobre las dos de la tarde.
P
ero la mujer continuó mal y sobre las cinco y media de la tarde era acompañada por su hijo al Ambulatorio de San Roque, donde entró por su propio pie. Poco después sufrió un ataque cardíaco que le produjo la muerte.

El médico forense de guardia se personó en el ambulatorio, realizó la correspondiente inspección del cadáver y consideró necesario su traslado a Pontevedra para la realización de la autopsia, según precisó José Luis Gómez, presidente de la Asociación Gallega de Médicos Forenses.

Teresa Paulos fue velada en el Tanatorio de Arousa donde también están los restos mortales del trabajador José Manuel Daponte Vila. El sepelio de la mujer fue a última hora de la tarde de ayer en el cementerio parroquial de Rubiáns.

La dirección de Larsa decidió cesar su actividad a las seis y media de la tarde para permitir que sus trabajadores pudieran acompañar a la familia en un momento de tanto dolor.

El sepelio de José Manuel Daponte Vila, trabajador de Autos Buenos Aires, presidente de la Asociación de Vecinos de Cornazo y directivo del Club de remo Vilaxoán, está previsto para esta tarde. A las 18.15 horas sus restos mortales serán trasladados a la iglesia parroquial San Pedro de Cornazo y después recibirá sepultura en el cementerio parroquial.

Fuente: Faro De Vigo